Ssimbwa Lawrence es presbítero misionero de la Consolata; actualmente trabaja en Colombia.  


viernes, 19 de mayo de 2023

El 21 de mayo, Día de la Afrocolombianidad.

Introducción

En el contexto afrocolombiano, el 21 de mayo es una  fecha muy importante, pues es el Día de la Afrocolombianidad. En esta fecha se conmemora la abolición de la esclavitud en Colombia que se dio el 21 de mayo de 1851 bajo la presidencia de José Hilario López. Es importante notar que, en el año 2001, el Congreso de Colombia a través de la ley 725 decretó el Día de la afrocolombianidad en homenaje a los 150 años de la abolición de la esclavitud en Colombia. Actualmente  son 172 años desde que se abolió la esclavitud en Colombia. Por eso, son varias las razones por las cuales el pueblo afrocolombiano celebra el 21 de mayo de cada año, tal como se muestra a continuación:

Una fecha histórica e inolvidable: El 21 de mayo de 1851 es una fecha inolvidable en la memoria histórica del pueblo negro en Colombia. En esa fecha se dio el inicio del camino de la liberación para el pueblo afro en Colombia. Ese día se rompieron las cadenas que habían amarrado a los esclavizados africanos desde los finales del siglo XV cuando llegaron por primera vez al puerto de Cartagena de Indias hasta 1851, cuando la esclavitud fue abolida. Ese día se logró lo inimaginable por muchos siglos: la prohibición de la esclavitud que se vivió en Colombia más de 300 años. Esa fecha histórica de 21 de mayo es celebrada cada año, porque hace recordar a la generación presente de donde el pueblo negro ha venido, sus luchas históricas  y hacia donde se proyecta.

Una fecha comparada con la pascua del pueblo judío: El 21 de mayo de cada año es una fecha muy trascendental para el pueblo negro colombiano, de tal manera que, es comparada con la pascua de los judíos. Es importante notar que, los judíos celebran anualmente la pascua porque en ella se festeja la liberación de su pueblo de la servidumbre faraónica en Egipto. Los judíos después de muchos años de servidumbre en Egipto, lograron su liberación obrada por Dios a través de Moisés. Antes del éxodo hacia la tierra prometida, celebraron la pascua que marcó el tiempo nuevo de la liberación (Ex 6, 6-7; Ex 12: 37-18:27). Para el pueblo afrocolombiano, la fecha que se compararía con la pascua judía es el 21 de mayo de cada año, día en que se conmemora siempre la abolición legal de la esclavitud en Colombia. Una fecha que fue el umbral de una nueva historia de los afrocolombianos, una fecha que puso fin a los siglos de servidumbre legalizada de los descendientes africanos y una fecha que marcó un paso adelante para la lucha perenne por los derechos humanos, la justicia y la vida digna del pueblo negro en Colombia.

Una fecha que anima a otras luchas en pro del pueblo afrocolombiano: El Día de la Afrocolombianidad es una fecha animadora para las luchas sociales en pro del pueblo afrocolombiano. La abolición de la esclavitud que aconteció el 21 de mayo de 1821, fue el logro más grande que el pueblo negro haya tenido a lo largo de la historia en Colombia. Ese logro fue fruto de las luchas y rebeliones anteriores de los cimarrones y palenqueros quienes por varios años a tras venían exigiendo la liberación del pueblo afro de la esclavitud. Esa fecha sigue siendo el punto de referencia para las luchas y reivindicaciones del pueblo negro en Colombia. Ahora la lucha no es de la esclavitud de cadena, sino, son luchas contra el racismo que se ejerce a los negros, lucha contra las injusticias a las que el pueblo negro está sometido, lucha por falta de educación de la que padece la mayoría de los afrodescendientes, lucha por el alto índice de desempleo, lucha por la falta de salud y por la vida indigna, entre otros.

Celebración del legado cultural afrocolombiano: La cultura es el legado que no se puede despreciar. Ella se hereda y transmite de una generación a la otra. La cultura se refiere al conjunto de bienes materiales y espirituales de un pueblo transmitido de generación en generación a fin de orientar las prácticas individuales y colectivas. Incluye modos de vida, costumbres, tradiciones, hábitos, valores, y conocimientos, entre otros. Dicho de otra manera, la cultura es el conjunto de sentidos y significaciones que informan la vida de un pueblo. El día de la afrocolombianidad tiene que ver con la celebración de la cultura afrocolombiana. Es una cultura muy rica en costumbres y tradiciones heredadas de los ancestros africanos. Es una cultura que ha aportado bastante a la cultura general colombiana. Así que, el Día de la Afrocolombianidad es una celebración del legado cultural afrocolombiano que ha contribuido enormemente a la construcción de la sociedad colombiana en general.

Los misioneros de la Consolata y la pastoral afrocolombiana

El espíritu de los misioneros de la Consolata con el pueblo negro empezó directamente con el beato José Allamano. Él fundó a los dos Institutos misioneros, es decir, los misioneros y las misioneras de la Consolata para evangelizar principalmente en África. Por eso, los institutos de la Consolata desarrollaron mucho su apostolado misionero en varios países de Africa y después en otros continentes. Por lo tanto, los misioneros de la Consolata están muy conectados con el pueblo negro desde los inicios de su fundación.

En el caso de Colombia, los misioneros de la Consolata han tenido siempre una conexión con el pueblo afro. Inclusive los primeros misioneros de la Consolata que llegaron a Colombia el 12 de diciembre de 1947 pasaron por Buenaventura, una tierra habitada en su mayoría por la población afrocolombiana. Eran los padres: Antonio María Torasso, superior del grupo, Juan Bautista Migani, Domingo Galbusera, Juan  Boetti y Juan Berloffa. Llegaban a Colombia, enviados por el padre Gaudenzio Barlassina, Superior General, en respuesta a la petición de monseñor Ismael  Perdomo, arzobispo de Bogotá,  que en un viaje a Roma había pedido el envío de los misioneros frente a la escasez de sacerdotes, especialmente en el Magdalena Medio.

La opción afro en Colombia empezó en 1983 en Pasacaballos en la Arquidiócesis de Cartagena y después en 1988 surgieron otras misiones con el pueblo afro en El Cabrero y Marialabaja en la misma Arquidiócesis. En  2002, la opción afro en la Región Colombia se fortaleció con la apertura en la Arquidiócesis de Cali y en 2016 los misioneros de la Consolata abrieron su presencia en Buenaventura con el fin de fortalecer la pastoral afrocolombiana y la inculturación del evangelio en la Diocesis de Buenaventura y en el Pacifico colombiano. Así mismo, en el norte del Cauca, aunque los misioneros de la Consolata allí trabajan concretamente con la opción indígena especialmente en Toribio, Tacueyó y Jambaló, siempre son puentes que unen entre los pueblos indigenas y afros, siendo éstos vecinos de las comunidades indigenas.

Así que, al celebrar el 21 de mayo, Día de la Afrocolombianidad, es celebrar también los esfuerzos de varios misioneros de la Consolata que han trabajado incansablemente por la opción afro en Colombia y por la defensa de la dignidad del pueblo afrocolombiano, tanto en la Costa pacífica y como en la Costa atlántica. Su esfuerzo y visión han marcado bastante el rumbo de la pastoral afro tanto en Colombia como en el continente americano.

Conclusión

La celebración del Día de la afrocolombianidad nos hace conocer más la historia del pueblo afrocolombiano. Nos hace entender las luchas del pueblo afro en materia de derechos humanos, la libertad y la vida digna. Y desde el punto de vista pastoral, la celebración del Día de la afrocolombianidad nos hace entender la importancia de la pastoral afrocolombiana, cuyo objetivo es siempre acompañar al pueblo afro para que éste desde su identidad cultural pueda identificarse plenamente con el proyecto del reino de Dios.

 


martes, 16 de mayo de 2023

El mes de mayo según el beato José Allamano.

 

El mes de mayo es tradicionalmente conocido como el mes de la Santísima Virgen Maria. En este mes se resalta bastante la importancia de  la Madre de Dios en la vida espiritual de los fieles católicos. En este mes dedicado para honrar a la Virgen María, se intensifica bastante el rezo del rosario, oración que tradicionalmente los católicos hacen para suplicar al Señor los favores a través de la intercesión de la Madre de Dios.

Es importante notar que, en el siglo XII nació la fiesta de la devoción de los treinta días a la Virgen María que tenía lugar entre la segunda quincena de agosto y la primera de septiembre. Sin embargo, un mes entero dedicado a la Virgen María se remonta al siglo XVII. En ese tiempo, el mes de la Virgen María incluía treinta ejercicios espirituales en honor a Ella. Fue en esta época que se incluyó un culto especial a la Virgen María en el mes de mayo, que es el que ha llegado hasta hoy.  Actualmente, desde el nivel familiar, parroquial y diocesano, se realizan varias actividades como el rezo del rosario diario para intensificar la devoción a la Virgen María.

La exhortación del beato José Allamano acerca del mes de la Virgen María.

El beato José Allamano era extraordinariamente devoto a la Virgen María bajo la advocación de La Consolata. Su vida espiritual era inseparable de la Santísima Virgen María. Para él, la Virgen Consolata era todo. Inclusive, los dos Institutos misioneros fundados por él llevan el nombre de la Virgen Consolata. Por eso, para él, el mes de mayo es muy importante por ser un mes dedicado a la Madre de Dios.

Según el beato José Allamano, la Virgen María es camino seguro para llegar a Jesús. Sencillamente no se puede llegar a Jesús sino por María. Al respecto dice José Allamano: “Si uno quiere salvarse sin pasar por María se equivoca. ¡A Jesús  por María! (Así los quiero, p. 220). Según el José Allamano  la Virgen María es canal de gracia porque todas las gracias de Dios pasan por Ella. Además la Madre de Dios es garantía de santificación, pues “quien quiera alcanzar la santidad sin la Virgen, es como quien pretende volar sin alas. Todos los santos fueron devotos de la Virgen María” (Así los quiero, p. 220).

Para ello, para José Allamano es muy importante el mes de mayo especialmente para los misioneros y las misioneras de la Consolata debido a las siguientes razones:

1.    Por ser hijos e hijas de la Consolata: Los misioneros de la Consolata son marianos por excelencia. La devoción a la santísima Virgen María bajo la advocación  de la Consolata hace parte del ser de los misioneros y las misioneras de la Consolata. Al respecto afirma el beato José Allamano: “Como hijos e hijas de la Consolata, vivamos bien el mes dedicado a María Santísima. Si todos deberíamos ser afectuosos con María, con más razón los misioneros y las misioneras. Por tanto tratemos de santificar este mes honrándola y creciendo cada vez más en el amor hacia Ella” (Así los quiero, p. 234). Aunque en el mes de mayo, todos los fieles católicos están llamados a acrecentar su devoción a la Virgen María, para los misioneros y las misioneras de la Consolata, les incumbe hacerlo con mayor fervor por ser hijos e hijas de la Virgen Consolata, su Madre y Fundadora de las comunidades misioneras a las que pertenecen.

2.    Imitar las virtudes de María: San Luis de Montfort en su obra espiritual mariana “Tratado de la Verdadera Devoción a la Santísima Virgen María” resaltó diez de las virtudes más importantes de la santísima Virgen María. Ellas son: la humildad profunda, la fe viva, la obediencia ciega, la oración continua, la mortificación universal, la pureza divina, el amor ardiente, la paciencia heroica, la dulzura angelical, y la sabiduría divina. Para ello,  el mes de mayo es para imitar las virtudes de la Virgen María. Al respecto dice el beato José Allamano que “tratemos de vivir este mes esforzándonos por crecer en la virtud que la Virgen nos sugiera: oraciones, homenajes, actos de virtud. Esto es lo que debemos hacer en este mes para honrar a María” (Así los quiero, p. 234).

3.    Amar más a la Virgen María: La Virgen María es Madre de amor y misericordia. Vale recordar que ante la escasez del vino en las bodas de Caná, Ella intercedió ante su Hijo, nuestro Señor Jesucristo para que la situación se mejorara.  Recomendó con amor a los sirvientes hacer lo que Jesús les dijera (Jn 2:5–9). Su intervención amorosa aportó a la felicidad de toda la boda, pues Jesús convirtió el agua en vino. El beato José Allamano sintetiza la invitación de amar a la Virgen María con esta frase: “Quiero que para ustedes sea el mes de María todo el año, porque deben estar como enamorados de la Virgen” (Así los quiero, p. 235).

4.    María es Patrona y Protectora de misioneros y misioneras de la Consolata: Para los misioneros y las misioneras de la Consolata, el mes de mayo es muy especial, pues la Virgen Consolata es la Patrona y Protectora especial de los dos Institutos fundados por el beato José Allamano. Sobre eso, afirma el beato José Allamano: “Ella sigue haciéndonos ver que ama a nuestro Instituto. ¡La he puesto como Patrona y Protectora para que se ocupe ella! (Así los quiero, p. 235). Así que, en este mes de mayo, es importante encomendar a la Virgen Maria la obra evangelizadora de los misioneros, pues Ella es la primera misionera de Jesucristo y la mayor intercesora de la Iglesia misionera.

Conclusión

Mayo es el mes de la Madre de Dios y Madre de la Iglesia. Es el mes para intensificar nuestra devoción a Ella. Como misioneros y misioneras de la Consolata, las palabras  del beato José Allamano, acerca del mes de mayo nos resuena con frecuencia: “Como hijos e hijas de la Consolata, vivamos bien el mes dedicado a María Santísima. Si todos deberíamos ser afectuosos con María, con más razón los misioneros y las misioneras” (Así los quiero, p. 234).